top of page

¿Por qué a las niñas y niños les gusta tanto el vermicompostaje?

Además de ser una actividad que nos permite estar en familia y compartir juntos, hay algo muy curioso que llama la atención de los niños. Y es que ver vida y conectarse con lo esencial es parte de nuestra naturaleza!

Muchas personas desde el mundo de la educación nos cuentan como el relacionamiento de los niñ@s con los procesos orgánicos y naturales les permiten desarrollar habilidades para la vida, tales como la capacidad de observar y asombrarse, al ir viviendo como los procesos van cambiando día a día. También les cultiva la paciencia y les permite entender el ritmo de la vida, el cual van incorporando naturalmente en el inconsciente.


Impresionantemente, nuestros hijos van siendo conscientes de que la basura no existe, y que más que basura, es un elemento más de nuestras vidas, que a través de un proceso “mágico”, se transforma en algo nuevo. ¡Qué mejor escuela que la que tenemos bajo nuestros pies!!


Y no solo esto, también nuestros hij@s van desarrollando habilidades como el trabajo en equipo, al establecer roles naturales: supervisar la vermicompostera, echarle la materia orgánica, cambiar los cajones, e ir a darle amor a las lombrices.


Como padres tenemos que aprovechar estas instancias de conexión, la cual nos permite conectarnos en familia con la naturaleza y sus ciclos, sino también aprender de nuestros hijos, de su capacidad de asombro, su creatividad, y como ven el mundo literalmente desde otro punto de vista.


Y qué mejor que ir al jardín o al balcón y permitir que los chic@s se ensucien las manos! ¿Quién no disfrutó una infancia en el barro jugando con lombrices?


Y, para que tus hijos aprendan didácticamente de vermicompostaje, les dejamos un juego para hacer en la casa!




153 visualizaciones0 comentarios

Comments


bottom of page